miércoles, 29 de abril de 2015

No una, sino muchas fotos

Una foto en la que apare un agricultor sosteniendo un verduguillo en las protestas del valle de Tambo en contra del proyecto minero Tía María, era en realidad la foto de la víctima de un “sembrado”, como lo demostró un video difundido posteriormente. 

La historia de esa foto revela que la represión contra los manifestantes antimineros está utilizando estrategias sucias y torpes. Pero esa no es la única foto de las protestas, existen otras que sí son verdaderas, como las del ataque a la compañía de bomberos. Así como también hay otras que muestran la violencia por parte de la Policía. La foto del agricultor fallecido es el ejemplo más trágico.


Una foto es un retazo de la realidad y no se puede analizar la realidad por retazos y mucho menos si nos llegan con la intención de fragmentarla. La visión general del conflicto en Islay, además, no va a depender sólo de la cantidad de retazos de realidad que logremos recoger a la distancia sino de la posición que ya tenemos sobre el tema. En el trabajo periodístico, la situación se traduce más o menos así: si no apoyas firmemente la protesta o criticas a sus promotores, entonces eres un periodista vendido; si concuerdas con la protesta, serás tildado de terrorista antiminero. Y esta situación de fuego cruzado se vive con más intensidad en el valle y la sufren más los pobladores. Mientras tanto, el gobierno promete agotar el diálogo. Dialogo que tendrá que caminar entre visiones fragmentadas, odios sembrados y afanes personales y económicos. No suena prometedor. (abr.2015)

Paradojas de la política

Existe algo que los candidatos ofrecen con insistencia durante las campañas electorales: hospitales. Pero en un distrito de Arequipa, un candidato fue elegido por ofrecer precisamente lo contrario: no construir un hospital. Y no se tratara de un ofrecimiento responsable, pensando en el alto presupuesto que demanda la infraestructura, el equipamiento y el personal especializado de un proyecto de gran envergadura. No fue eso, pues la inversión está disponible.

La historia comenzó cuando el ex alcalde de Mariano Melgar, Oscar Ayala, consiguió lo que muchos otros burgomaestres hubieran querido, que el Ministerio de Salud eligiera su jurisdicción para construir un nosocomio. Los vecinos se opusieron al proyecto debido a que en el terreno escogido funciona desde hace muchos años un campo deportivo.

Las protestas fueron permanentes, pese al ofrecimiento de construir un nuevo campo deportivo en otro espacio. Uno de los principales opositores fue Edwin Martínez, viejo contrincante político de Ayala, quien con la promesa de no permitir la construcción del hospital logró ser elegido como el nuevo alcalde de ese distrito. Paradójico.

Sin embargo, ya en el cargo, Martínez ha cambiado de postura y busca dialogar con los vecinos para explicar los beneficios de contar con un hospital en la zona, beneficios que anteriormente él mismo negaba. El compromiso legal asumido por el municipio con el gobierno central para la realización de esta obra además de beneficio es ineludible.


Casos como éste nos recuerdan que los políticos opositores se inspiran con frecuencia en afanes personales más que en intereses colectivos y que el ciudadano está en la obligación de saber distinguir lo uno de lo otro y no dejarse llevar por los discursos acalorados. (abr.2015)

Razones para desconfiar

Las elecciones locales del año pasado sirvieron también para medir el rechazo de la población al proyecto minero Tía María: las autoridades electas son activos dirigentes antimineros. Todos los análisis coinciden en que la razón de este rechazo es la profunda desconfianza de la población respecto a la empresa privada, en particular Southern, y el Estado. Y en este caso no se trata de ganar la confianza, sino de recuperarla y eso es más complejo aún, pues se trabaja en base a experiencias pasadas negativas; y en esas circunstancias los grupos humanos son más proclives a mantener una actitud que a cambiarla.

Las protestas de 2011, en contra de Southern, cesaron cuando la UNOPS señaló más de 181 observaciones al Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto minero. La empresa suspendió actividades con el compromiso de subsanar lo observado por el organismo adscrito a la ONU. El flujo regular de este proceso debería ser que UNOPS revise nuevamente lo corregido por la minera, algo que ciertos sectores están pidiendo. Pero, en lugar de eso, el Ministerio de Energía y Minas, pretende exponer el nuevo EIA a la población, lo cual no deja de ser democrático, pero insuficiente para demostrar que, en efecto, ese documento garantiza que la minería no afectará a la agricultura del valle, como los pobladores temen. Sobre todo porque se trata de un documento técnico. Con este proceder no se abona mucho en la recuperación de la confianza que tanto se necesita.


Los esfuerzos del que quiere obtener la confianza no deberían tener reparos, no deberían dejar ningún espacio a la sospecha; y eso no está sucediendo con el proyecto Tía María. (abr.2015)

La cruz de Tambo

Jaime de la Cruz
Jaime Trinidad de la Cruz Gallegos junto a otros dirigentes antimineros del valle de Tambo fueron sentenciados en 2014 por el Juzgado Unipersonal de Islay a cuatro años de pena suspendida por el delito de entorpecimiento del funcionamiento a los servicios públicos, debido a los disturbios de abril de 2011 en contra del proyecto Tía María.  De la Cruz apeló y con el proceso judicial en revisión fue elegido alcalde de Deán Valdivia.

La participación de De la Cruz en el actual paro indefinido en Tambo sirve como ejemplo para tratar de entender el manejo de este conflicto desde las dirigencias. El voto popular que lo pone en el sillón municipal le otorga mayor legitimidad, en términos democráticos, respecto a un cargo dirigencial; pero él ha optado por continuar “detrás de la trinchera”, en la cerrazón y la intransigencia, dejando de lado las posibilidades de dialogo, que en su nueva condición podrían manejarse a favor de la población que siempre ha sentido que el diálogo se conduce a favor de la empresa privada.


Se ha difundido un audio en el que De la Cruz se dirige al presidente Ollanta Humala con términos vulgares para devolverle, supuestamente, la alcaldía. La irreproducible frase es celebrada por la muchedumbre que no repara en que son ellos los que le dieron la alcaldía, no el Presidente. Como tampoco reparan en que el actual conflicto se ha convertido en una autoflagelación lamentable para todos, en la que sus dirigentes arman escalones políticos con los legítimos reclamos de una población agrícola que se siente amenazada por la minería. Mientras tanto, en el gobierno central el pulseo de poderes sigue su juego, como si nada más importase. (abr.2015)

Esperando nuevos ministros

Durante el debate parlamentario que terminó con la censura de la Premier Ana Jara quedó en claro que, si bien la razón expuesta era el rastreo realizado por la DINI a opositores y ciudadanos, la decisión fue tomada en rechazo a las políticas de gobierno en general. “Un jalón de orejas”, lo han llamado; pero la comparación es muy ligera, tomando en cuenta que el país ha quedado en una complicada crisis política. Censurar a un Primer Ministro es asunto mayor aunque sus promotores pretendan minimizarlo.

Ana Jara
En Arequipa, la censura al gabinete Jara repercute directamente en el manejo del conflicto existente en el valle de Tambo por el rechazo al proyecto minero Tía María, entre otras cosas porque la Mesa de Desarrollo instalada en la zona contaba con la participación de los ministros de varias carteras, cuya situación queda en suspenso. El forzado cambio de gabinete también afecta a los damnificados por los desastres naturales en todo el país que esperan ayuda del gobierno central.

A cambio de todo esto, qué se consigue con la censura: Demostrar la debilidad del gobierno y ese es sólo un mezquino cálculo político, sin desmerecer la importancia de las denuncias contra la DINI, que debieron tener mejor arreglo en aras de solucionar los problemas urgentes del país.


Aunque a estos parlamentarios también les correspondería una censura, es preocupante el escenario de una posible disolución del Congreso, si no otorga la confianza al nuevo gabinete. Esperemos que eso no suceda. Pero, además de cruzar los dedos, como ciudadanos nos corresponde anotar bien el nombre de los actuales congresistas para no cometer el error de volverlos a elegir. (mar.2015)

Lo bueno, lo malo y Tía María

Foto: Gestión
Es bueno que la población quiera proteger al valle de Tambo del daño ambiental que causaría la actividad minera. Además, es comprensible la desconfianza que existe frente a la empresa minera y el Estado. Recordemos que Southern consiguió el aval del gobierno, para el proyecto Tía María, con un Estudio de Impacto Ambiental (EIA) al cual la UNOPS hizo 138 observaciones; y que esta evaluación se produjo sólo después de que dos personas fallecieron en medio de violentas protestas en el 2011.

Lo que no pinta tan bien es que la legítima preocupación de una comunidad termine en manos de dirigencias que parecen más preocupadas en los réditos políticos que en el problema de fondo. Que busquen artilugios populistas para negarse a dialogar y negarle no sólo a Tambo, sino a toda la región y al país, la posibilidad de un desarrollo económico armónico con el ambiente; pues esa fuerza popular que hoy se emplea para decir “no” a rajatabla, bien  podría servir para imponer condiciones a la explotación minera y exigir mecanismos que garanticen su cumplimiento. Pero eso, claro, acabaría con la vigencia política de muchos dirigentes.


El Ministerio de Energía y Minas se ha propuesto explicar cómo han sido levantadas las observaciones de la UNOPS al EIA de Tía María; y el gobierno ha instalado una Mesa de Desarrollo para el valle; pero, aferrados a formalidades, los dirigentes antimineros no quieren participar. Bien haría el gobierno en cubrir todos los baches en el proceso de comunicación con la población en su conjunto. De otro lado, no estaría mal que los dirigentes den señales verdaderas de apertura al dialogo, aunque sea sólo para luego tener mayores fundamentos en su rechazo. (mar.2015)

Menos que animales

Lo encontraron muerto de hambre, literalmente. Rocko llevaba varios meses encerrado en la vivienda en donde Hugo Galindo, su dueño, lo dejó sin alimento. El pobre can fue rescatado por los miembros de una asociación humanitaria, pero nada pudieron hacer por él.  El estado en que fue encontrado partía el alma y quienes vieron ese cuadro no se conformaron con la indignación que sintieron y denunciaron a Galindo ante las autoridades.

Hoy miércoles revisarán el caso en la Comisaría de Palacio Viejo, pero no se puede esperar mucho. Las leyes peruanas no son severas para este tipo de casos y lo más probable es que nada impida que en el futuro, éste y otros hugos galindos sigan torturando animales.

“Una civilización se puede juzgar por la forma en que trata a sus animales”, dijo Gandhi y con esa medida nuestro país queda prácticamente en la categoría de salvaje. Ayer mismo, en un video que circuló por Internet, se observaba a un sujeto que, machete en mano, desnucaba a un cachorro. Sucedió en Cusco. El indefenso perrito era tan pequeño que llegaba apenas a los tobillos de su verdugo, el cual reía de su “proeza” con un rostro en el que se perdía todo concepto de lo humano. ¿Quién es el animal?, me pregunto. Pero siento que atribuir la palabra “animal” como adjetivo para un sujeto como aquél, es tanto como halagarlo.


A la crueldad además sumamos la indiferencia. Incluso de aquellos que en un aparente amor desbordado por sus mascotas gastan en superficialidades para sus “consentidos”, cantidades de dinero que bien podrían servir para aliviar el hambre de una docena  de perros abandonados. Las leyes debe mejorar; nosotros como seres humanos, también. (mar.2015)

¿Debemos reelegir a este Congreso?

Aun cuando la práctica en nuestro país ha demostrado con creces la sinonimia entre reelección y corrupción, eran de esperarse las opiniones en contra de la ley que prohíbe la reelección inmediata de alcaldes y presidentes regionales, que ahora se llamarán gobernadores regionales, que se promulgó ayer. El principio de esta ley es impedir que las autoridades utilicen los recursos del Estado que administran para costear sus campañas de reelección.

Uno de los argumentos que se ha escuchado en contra de la nueva ley es revelador, aunque agobiante: “lo único que se logra es que los alcaldes roben más rápido, pues tendrán menos tiempo para hacerlo”. Aunque fuera verdad y operativamente posible, esto no contradice la necesidad de esta ley, pues lo mismo podríamos decir del Presidente de la República que también tienen impedida la reelección inmediata. 

Lo que sí revela este tipo de opiniones es, nuevamente, el total descrédito  de la clase política, partiendo del hecho que los congresistas, que aprobaron la ley, no se tomaron mucho tiempo para desestimar la necesidad de que ellos también sean incluidos en esta prohibición.
“No manejamos dineros del Estado”, sostienen los legisladores. Pero lo que ellos manejan es: poder, tanto o más valioso que un presupuesto municipal. Ese poder que se negocia bajo la mesa para aprobar, modificar o ignorar leyes con nombre propio y que luego se traduce en apoyo económico en las campañas electorales.


Argumentan también un congresista reelegido ofrece más experiencia en el trabajo legislativo, obviando la necesidad de consolidar el trabajo político en los partidos para que los nombres de valor que ofrezcan al país no se lleguen a contar con los dedos de la mano. (mar.2015)

Machismo a todo nivel

El año pasado en Arequipa, 10 mujeres fueron asesinadas por sus parejas. El llamado feminicidio es resultado de una sociedad machista que, clara o soterradamente, concibe al varón como superior en derechos y libertades frente a la mujer. Un dato alarmante, que proporciona la coordinadora regional del Centro Emergencia Mujer de Arequipa (CEM), es sobre las 21 mujeres que fueron víctimas de tentativas de homicidio. Ellas fueron animadas a regresar al lado de sus agresores pues, entidades como la Policía, el Ministerio Público y el Poder Judicial buscan que la pareja se reconcilie, “en una falsa idea de unidad familiar ", según ha explicado la coordinadora del CEM, Ruth Gallegos.

Con frecuencia se acusa al discurso feminista de “victimista”. Pero, vamos por partes. Primero, el feminismo sólo reclama la igualdad de derechos y oportunidades de la mujer en la sociedad.  Segundo, si bien la propia mujer forma parte de esta sociedad machista, no deja de ser la más afectada. 

Según el  INEI, en cuatro años, por igual trabajo en iguales condiciones entre hombres y mujeres, los salarios de los hombres aumentaron S/.520 más que las mujeres “sin ninguna justificación más que solo el hecho de ser mujer”. Y según Servir, los varones ocupan el 70% de los cargos en el nivel directivo mientras que las mujeres solo el 30%, a pesar que un estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) indica que Perú tiene la mayor población laboral femenina:  66.8%, cuando el promedio en la región es de 56.6%.

Sirvan las cifras para identificar una razón por la que es importante, al menos una vez al año, recordar el Día Internacional de la Mujer. Sin desdén ni trivializaciones.(mar.2015)



martes, 28 de abril de 2015

Se viene la reforma electoral

Las elecciones del año pasado nos dejaron una clara lección: necesitamos una reforma electoral. Candidatos con prontuario o malas gestiones en su currículo, movimientos políticos improvisados y manejados en la turbiedad o decisiones cuestionables de los entes electorales, son algunos de los casos que han hecho perder la fe en nuestro sistema democrático y de eso se ha hablado mucho.

La presidenta del Congreso, Ana María Solórzano, ha anunciado que la reforma electoral será debatida por el pleno el próximo jueves 5 de marzo, tras iniciarse la primera legislatura del 2015. El asunto es bastante delicado tomando en cuenta que esta reforma estará en manos de políticos cuestionables que ya están en campaña para el 2016.

¿Tendremos que ver como nuestra clase política defrauda una vez más a la ciudadanía? Puede ocurrir, sobre todo porque no estamos organizados como sociedad. Los partidos políticos, que debería ser los intermediarios entre la sociedad y el Estado, no tienen credibilidad en nuestro país y no hemos encontrado otro medio de interactuar.

Aunque suene iluso, las redes sociales de Internet están cumpliendo, en cierta medida, este papel. Son varias iniciativas legislativas que se han detenido a partir de la voz popular emanada desde estas redes y llevada a la calle.(feb.2014)


En el caso de la reforma electoral, el Jurado Nacional de Elecciones ha abierto esta ventana. Se puede obtener información sobre las propuestas legislativas que serán debatidas en el Congreso, ingresando a las cuentas Facebook, Twitter y YouTube del JNE y participar interactuando en las publicaciones a través del hashtag #ReformaElectoralYA. Si no nos damos el trabajo de participar, después no tendremos autoridad moral para quejarnos. (feb.2015)

Adicción a la basura

Como todos los órganos del cuerpo humano, el cerebro necesita ejercicio para no anquilosarse, lo dice la neurociencia. El ejercicio elemental del cerebro es pensar. Fisiológicamente, el pensamiento requiere del estiramiento de las dendritas para que exista contacto interneuronal (sinapsis). Cuando las actividades humanas no demandan mayor esfuerzo mental, las dendritas reducen su propiedad de estiramiento y nuestra capacidad de pensamiento también disminuye, según sostienen algunas teorías ontogénicas del sistema nervioso.

Escrito en un pentagrama, el ritmo del reggaetón es plano y sencillo, casi equivalente a una ronda infantil. Según la neuropsicología, los infantes asimilan mejor una ronda debido a que su cerebro se encuentra en una etapa inicial de desarrollo.  Pero, este mismo patrón aplicado en adultos adormece la capacidad neuronal. Quizás por eso resulta “pegajoso”.

Similar proceso ocurre con la llamada televisión basura: no demanda mayor esfuerzo mental. El agotamiento que produce la vida cotidiana es para muchos una justificación suficiente para consumir entretenimiento fácil de digerir. Y en ese sentido, la televisión por sí misma es fácilmente digerible. El acto de colocarnos enfrente de un monitor y consumir lo que otros deciden que debemos consumir no es nada complicado, esto lo vuelve atractivo  y la continuidad, adictivo. Entonces, el consumidor pierde la voluntad y los efectos llegan a ser irreversibles.


Una sociedad educada e instruida es lo mejor en contra del embrutecimiento que puede producir el consumo de televisión. Pero lamentablemente, una sociedad así es más difícil de alcanzar que algo de control sobre los peores contenidos que ofrece la televisión. La regulación no es el remedio, pero el Estado debe hacerla. Así como regula el consumo de alcohol o tabaco. (feb.2015)

Espiral lluvioso

Desde que todos los que vivimos en Arequipa tenemos memoria, la ciudad colapsa en temporada de lluvia. Y sí, las precipitaciones pluviales, como dicen los meteorólogos, son abundantes; pero, luego de décadas de experiencia ya tendríamos que haber aprendido a afrontarlas. Pero no.
A fines del año pasado se inauguró el by-pass de Uchumayo, con un costo de 42 millones soles. El drenaje de la obra tiene una capacidad para evacuar un metro cúbico de agua por segundo, ¡Un metro cúbico! Cuando las lluvias en Arequipa suelen superar los 10 m3 por segundo. Como era de esperarse, la obra vial se convirtió en un singular “balneario” (como señalan algunos con humor), además, porque estaba inconclusa y la falta de veredas dejó desprotegidas las construcciones aledañas. Lo mismo sucede con muchas obras viales recientemente construidas. La falta de capacidad técnica no justifica tamaño error y no culpen a los ciudadanos que pensamos que la corrupción tiene la mayor parte de culpa.

El tristemente famoso “diezmo” que las constructoras pagan a las autoridades locales, no afecta sus ganancias sino la calidad de las obras. Esta es una lección para quienes justifican al que “roba pero hace obra”. Ahora ven que la obra es un perjuicio para la ciudad cuando no hay honestidad de por medio. Se utilizan mal los recursos del Estado y estos tienden a ser menores con cada año que pasa. Nos hemos mal acostumbrado a que haya dinero en manos de malas autoridades.


Lamentablemente, cuando la temporada de lluvias haya terminado, dejaremos el tema en segundo plano y volveremos a elegir a quienes no merecen gobernar nuestra ciudad y nuestros distritos. (feb.2015)

Inhumano

Foto: La República.
Cuando el Hospital Goyeneche abre sus puertas, a las 5:00 de la madrugada, más de 200 personas ya aguardan en las afueras para ser atendidas. La cuarta parte no obtendrá una cita. Algunas llevan esperando desde la noche anterior o estuvieron varios días acomodando cartones en la acera para sentarse y esperar atención médica. Es verano y el 25% de galenos está de vacaciones, lo cual agrava la precariamente habitual atención en este nosocomio.

En la cola de espera hay pacientes con reumatismo y otros males que se agravan con el frío de la calle, pero eso no es lo peor; sino que el inhumano trato es una historia que lleva varios años, tantos que el actual director del hospital, Guillermo Velarde Paredes, reconoce que cambiar la situación es una tarea difícil.
En la fila, los pacientes reclaman por más hospitales y en realidad esa no es la mejor solución. Construir un hospital puede costar más de 80 millones de soles, como está presupuestado por la actual gestión en el gobierno regional. Pero, lo que el dinero no puede remediar pronto es la falta de especialistas médicos, cuyo déficit actual es del orden del 60%, según la propia Federación Médica del Perú.


En estas fechas, el Hospital Goyeneche sólo atiende a cuatro pacientes de cardiología al día, por ejemplo. La explicación es la falta de especialistas. Y fue precisamente la falta de personal médico lo que aparentemente, el pasado domingo 25 de enero, dejó sin atención oportuna a un gran hijo de la ciudad, el poeta Luzgardo Medina Egoavil, quien acudió a dicho nosocomio con un problema cardiaco que le causó la muerte. Esto debe cambiar, por humanidad. (feb.2015)

Camarón que se pierde

Hace más de 20 años, los bañistas de las playas arequipeñas regresábamos a casa con bolsas llenas de machas. Bastaba despertarse temprano, acercarse a la orilla del mar y sacudir la arena con los pies para obtener este sabroso molusco, que formaba parte importante de la dieta regional. Para inicios del siglo, el recurso fue desapareciendo hasta ser declarado en extinción. Recién en 2011, el Estado inició un programa de repoblamiento que aún no ha logrado su objetivo. Si nos descuidamos, lo mismo podría suceder con el camarón de río.

Por cada cola de camarón que se consume durante la época de veda se pierden unos 2500 huevos, lo que interrumpe el ciclo de vida de esta especie y la pone en riesgo de extinción, tomando en cuenta que la prohibición no es respetada. A sólo dos semanas de iniciado el periodo de veda, el Ministerio de Producción incautó más de 1500 kilos de camarón de río en Arequipa, Ica y Lima.

La ley sanciona a quienes extraen, comercializan o procesan el camarón en veda, pero no deja de existir una responsabilidad  compartida del consumidor. Un consumidor que, por cierto, cae en tamaño despropósito, no sólo por poner en riesgo a esta apreciada especie, sino porque durante esta época los camarones no son el suculento crustáceo que caracteriza a la comida arequipeña, sino que están apenas en desarrollo. (feb.2014)


La veda del camarón se extiende este año hasta el 31 de marzo. Hasta esa fecha, el respeto por la tradición culinaria arequipeña se expresará en un hecho bastante concreto: no consuma camarón. No estaría mal, además, denunciar a los malos comerciantes, pues de poco sirve lamentarse, sino no vamos a poner nada de nuestra parte. 

Calor: problema serio

El nevado Hualca-hualca ha sido por cientos de años la reserva de agua natural para el poblado de Cabanaconde en el valle del Colca. Regularmente, por sus manantiales discurrían 70 metros cúbicos de agua por segundo. Desde hace algunos años, ese aforo ha aumentado hasta los 150 metros cúbicos –más del doble-, debido a que el glaciar se está derritiendo a causa del cambio climático. Que se cuente con más agua ahora no es el problema, sino que esa reserva de recurso hídrico se está agotando rápidamente y no se están tomando previsiones.

A nivel global, se prevé que la temperatura se incrementará alrededor de dos grados centígrados, en los próximos 20 años. Esto significa innumerables cambios climatológicos que ya están comenzando a sentirse, como sequías e inundaciones. Arequipa, por supuesto, no es la excepción. Enfrentados como estamos a la condición desértica de nuestro clima es más preocupante que no se hayan tomado previsiones.

Ante la persistente escasez de lluvia, la empresa de saneamiento (Sedapar) está  evaluando desde cuándo producirán los cortes de servicio y fijando la cantidad de agua para cada ciudadano. ¿Y después qué?


Si hoy mismo se dejaran de lado las prácticas que contaminan el ambiente y aceleran el calentamiento global, el proceso no se detendría. El daño ya está hecho. Pero sí se puede evitar que los efectos sean mayores y empezar a comprender que tenemos que adaptarnos. Mantener grandes jardines con agua potable, por pura complacencia personal, ya no es sólo un lujo es prácticamente un crimen. Derrochar agua, no reciclar, no utilizar productos biodegradables, desperdiciar papel, malgastar energía, etc. son actividades que, desde nuestro pequeño lugar en el planeta, nos hacen responsables de su deterioro.(ene.2014)

Que no se repita


Un oficial de la Dircote acude a una obra de teatro, en noviembre del año pasado, y encuentra en ella una “evidente apología al terrorismo”, según un informe que remite a sus superiores. El Procurador Anticorrupción, Julio Galindo, confirma que se ha dispuesto una investigación sobre “La Cautiva” y que está en plena evaluación. “¿Ha visto Ud. la obra?”, pregunta un reportero. “No”, responde Galindo y añade: “No hace falta”. Ese tipo de respuesta me recuerda la década de los 90, cuando la política antiterrorista tenía a los ciudadanos bajo sospecha sin lugar a reclamo.

Afortunadamente, estamos lejos de aquellos nefastos años. Pero, episodios como la investigación que se está haciendo a una obra de teatro que ficciona sobre los años de violencia en el Perú, sirve para evaluar qué hemos hecho para impedir que ese oscuro episodio se vuelva a repetir.


No hemos sabido utilizar esa dolorosa parte de nuestra historia para aleccionar a las nuevas generaciones que, apenas, saben que existió. Y no hemos podido hacerlo porque ni siquiera nos ponemos de acuerdo en qué historia contar. Hubo fuego cruzado en aquellos años, y cada uno lo recuerda según el lado de donde vio llegar la bala. De ese juego de perspectivas, la mezquina política se vale para mantener en silencio capítulos de la historia que no deberían olvidarse.


Más de 30 sentenciados por terrorismo saldrán libres este año, luego de cumplir sus condenas. Entre ellos, Peter Cárdenas Schulte, el número dos del grupo terrorista Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA). Los políticos nuevamente alzarán discursos indignados y justicieros, esperando ganar votos para las elecciones que se acercan; pero, nada más que eso: discursos. (ene.2015)

Oro líquido

Cuando un recurso es necesario y escaso, se le suele llamar “oro”. El agua es oro líquido. Cuando el manejo de este tipo de recursos está en manos de unos pocos, no tarda mucho en generarse manejos mafiosos, que benefician a grandes poderes económicos y perjudican a la mayoría. 

Digo esto porque en nuestra ciudad, pese a las posibilidades de lluvia, seguimos enfrentando la amenaza de una sequía; mientras que el escaso “oro” que tenemos guardado se maneja de manera, por decir lo menos, extraña.


Con las intensas lluvias de febrero del año 2013, el Sistema de Información Regional Agraria reportó que la represa de Aguada Blanca había superado su capacidad máxima de almacenamiento de agua y, según Autodema, el recurso hídrico en el Sistema Regulado del río Chili –que incluye también las represas de El Frayle, Pañe, Pillones y dique Los Españoles- podría abastecer a la provincia por cinco años. Sin embargo, en setiembre del año pasado, sólo un año y ocho meses después de la “buena noticia”, la ciudad comenzó a recibir agua de los sedimentos, es decir de la parte profunda de la represa de El Pañe. Al menos eso es lo que Autodema sostuvo para justificar el olor pestilente que salía de los caños en los hogares arequipeños. 

Ahora, vivimos rezando para que llueva, pues la Autoridad Autónoma del Agua ha calculado que el agua alcanzará sólo hasta octubre. ¿Y los cinco años que dijeron? O fueron muy optimistas en el pronóstico o el consumo duplicó las expectativas. ¿Y qué podría habar aumentando así el consumo de agua? Regreso sobre lo anterior, el manejo de nuestro oro líquido está turbio. ¿Aló, Autodema, Sedapar, alguien? (ene.2015)

Año nuevo, problemas viejos

Aún con las promesas de campaña frescas en la memoria de sus electores, la nueva presidenta regional de Arequipa, Yamila Osorio, ha anunciado la construcción de 4 hospitales, en La Unión, Caravelí, Camaná y Arequipa, con un costo de S/. 80 millones por cada uno (S/. 320 millones en total). Según el presupuesto 2015 aprobado la semana pasada, por el Consejo Regional que ella preside,  el monto disponible para obras, para el año que ya comienza, es de S/. 315 millones. No, no cuadra, tomando en cuenta, además, que son más de 70 obras inconclusas que también ha anunciado que deberán ser continuadas.

La diferencia numérica es salvable, tomando en cuenta que son 4 años de gestión en los que podrá desarrollar este gran proyecto hospitalario, en lo que se refiere a infraestructura. Pero, un hospital no es sólo fierro y cemento; es más, con sólo eso no se ha hecho nada. Sin implementación un centro hospitalario no funciona y menos aún sin personal calificado. Este último factor es el más crítico y, al parecer, el menos evaluado. Actualmente, ya existe un déficit de especialistas médicos. El voceado Instituto Regional de Enfermedades Neoplásicas da cuenta de ello, pues muchos pacientes con cáncer siguen teniendo la necesidad de buscar atención en Lima, por la falta de especialistas en la región.

El problema comienza por el factor económico, pues una especialidad es costosa y son pocos los profesionales que se especializan. Además, a quienes lo hacen les desalienta el servicio público por las bajas remuneraciones en comparación al servicio privado. Cómo se ve, la solución a este problema es compleja y aún no se ha planteado. Esperemos que se comience a hacer, antes de malgastar recursos en elefantes blancos. (dic.2014)

Tentáculos sobre la “ley pulpín”

Miles de jóvenes protestando en las calles son un capital político nada despreciable, un bolsón electoral que ningún aspirante a la presidencia puede dejar pasar por alto. Y ese es el principal riesgo para quienes participan con convicción en las protestas en contra de la llamada “ley pulpín”. Un riesgo que va aumentando con cada día que pasa.

Ya tenemos a congresistas que aprobaron el nuevo régimen laboral juvenil reculando y sumándose a las protestas; así como a políticos opositores aprovechando la ocasión para vilipendiar al gobierno de turno y pintarse una aureola de santidad.

“Cuando la injusticia es ley, la rebeldía es deber”, se lee en algunos de los carteles que portan los jóvenes en las recientes marchas y entre ellos se percibe una legítima indignación y una auténtica vocación de respeto por sus derechos. Nobles ideales que, como suele suceder, corren el riesgo de caer en malas manos y ser utilizados con fines particulares bastante ajenos a la verdadera causa. Evitar que esto suceda es la segunda lucha que se tiene que enfrentar.


Por ahora, el gobierno sigue defendiendo esta nueva ley y enfrentando las protestas sólo como un tema de orden público. Debido a su tórrido romance con la Confiep, del gobierno sólo se puede esperar, en el mejor de los casos, que suspenda la aplicación de la norma hasta que sus “beneficios” sean entendidos. A juzgar por el modus operandi de la pareja presidencial, la decisión final se dejará esperar, a fin de que la ley en discusión cumpla su papel distractor respecto a las denuncias de corrupción que rondan Palacio de Gobierno. Escenarios menos optimistas también son posibles y aún más temibles. (dic.2014)